¿Plataformas digitales: gasto o inversión?

En la industria de la construcción, la adopción de plataformas digitales está transformando la manera en que gestionamos proyectos, controlamos costos y optimizamos recursos. Pero surge una pregunta clave: ¿estas herramientas son solo un gasto o una inversión estratégica?

Más allá del costo inicial

La respuesta es clara cuando analizamos el impacto a largo plazo. Si bien la implementación de una plataforma digital puede representar una inversión inicial significativa, los beneficios que proporciona en términos de ahorro y eficiencia superan con creces este desembolso. Plataformas enfocadas en la gestión de proyectos, como el control de costos o la planificación de recursos, permiten evitar errores costosos, retrasos y desvíos en el presupuesto.

Datos que respaldan la inversión

En Chile, un estudio realizado por Construye2025 reveló que un 61% de las empresas de construcción han comenzado a adoptar tecnologías digitales, con un enfoque en la mejora de la productividad y la reducción de errores en obra. Además, se estima que la digitalización de los procesos constructivos puede generar ahorros de hasta un 20% en los costos operativos. Estos números no solo destacan la relevancia de la transformación digital, sino que confirman que invertir en estas plataformas es clave para optimizar recursos y garantizar un retorno de inversión tangible.

Ahorro tangible en cada fase del proyecto

El uso de tecnología en la construcción no solo mejora la comunicación y la colaboración entre los equipos, sino que también ofrece un control más preciso sobre los recursos. Herramientas que centralizan la información en tiempo real ayudan a prever desviaciones y tomar decisiones informadas antes de que los problemas escalen. Este enfoque reduce las pérdidas y optimiza los resultados financieros del proyecto, lo que convierte a las plataformas digitales en una inversión que genera retornos a lo largo del ciclo de vida del proyecto.

Un impulso a la competitividad

En un sector tan competitivo como el de la construcción, las empresas que implementan plataformas digitales ganan una ventaja frente a sus competidores. La capacidad de ofrecer transparencia y previsión a los clientes, junto con la mejora en la ejecución, no solo fortalece la reputación de la empresa, sino que abre nuevas oportunidades de negocio.

Conclusión

Invertir en plataformas digitales no es solo una cuestión de mantenerse al día con la tecnología, sino una estrategia para optimizar los recursos, minimizar riesgos y asegurar un mayor rendimiento financiero. En definitiva, las plataformas digitales en la construcción son una inversión sólida que impulsa la eficiencia y la competitividad. Con el creciente uso de estas tecnologías en Chile, la digitalización del sector se convierte en un elemento crucial para mantener la competitividad y lograr ahorros significativos.